¿Qué sucede en Bolivia?: diálogo con el periodista Pablo Ortiz

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Videos y fotografías de cadáveres en calles de Cochabamba, más de 40 mil positivos, mil 500 muertos (cifras oficiales) y una presidenta Jeanine Áñez enferma de Covid-19 son hechos que ponen a Bolivia en una situación complicada y delicada para enfrentar una pandemia que actualmente golpea a Latinoamérica con mayor dureza que al resto del mundo.

“Las imágenes que circularon ayer (7 de julio), que fueron noticia en el mundo, pertenecen a la ciudad de Cochabamba. Es la tercera ciudad de Bolivia y está justo en el centro del país”…

“Es como el corazón de Bolivia. Y lo que ha sucedido ahí es un colapso del sistema funerario; es decir, mueren más personas de las que se pueden enterrar al mismo tiempo”, apunta el periodista Pablo Ortiz, quien concedió una entrevista online a Deshuesadero.

“Pero no solamente tiene que ver con eso. Es, ¿dónde mueren esas personas? Esas personas mueren en sus hogares. Y eso causa un problema jurídico bastante serio, que tiene qué ver con certificar la defunción”…

Explica Ortiz, quien agrega en un diálogo: “Y eso requiere un trámite, que, como entenderás, por las cosas que tiene esta pandemia, ha saturado también el sistema judicial; es decir, a las personas especiales de lucha contra el crimen que tienen qué ir a certificar a tú casa que la muerte fue un deceso no violento, posiblemente por motivos del coronavirus”.

Ortiz es claro al señalar que “eso genera, ya, de hecho, que hay un velorio muy íntimo, de la familia con el muerto, conviva con su muerto, si es que vale el término de contradictorio, y que eso incrementa el dolor en la personas. Al no recibir esa atención, y al no haber quién vaya a la casa a certificar la muerte y tener qué hacer todo el trámite para enterrarlo, los tiempos se van alargando cada vez más”.

La realidad es que en Cochabamba, “por desesperación de la gente, por una cuestión de reacción propia al dolor, han decidido, algunas personas, sacar a su muertos a la calle, generando este tipo de imágenes”.

Ortiz brinda una radiografía de lo que experimenta Bolivia: la crisis sanitaria, funeraria, económica y política, factores que pone al país en una situación compleja y dolorosa.

“En Santa Cruz no se ha visto mucho, pese a que hemos tenido casos en Santa Cruz donde la familia encima tiene que deambular con sus muertos buscando dónde enterrarlos, porque hay personas que te impiden, vecinos asustados por contagiarse por un muerto por coronavirus, que el virus camine por la tierra, y aflore en sus hogares, que te eviten el acceso al cementerio”.

Con información de Deshuesadero https://bit.ly/3fjADEH