La WWE prometió la mejor lucha de la historia y entregó un combate de gran calidad en el que Randy Orton cobró venganza contra Edge por la derrota que sufrió en Wrestlemania y con una patada a la cabeza se quedó con la victoria en el evento estelar de Backlash.
Randy Orton comenzó de buena manera, la “víbora” fue rápido ante los golpes de Edge y los evitó, además de que aplicó varios castigos que sacaron un poco de concentración al canadiense, aparentemente no vio venir el ritmo con el que su rival comenzó.
La Super Estrella categoría R remontó un poco la batalla cuando logró que Orton le siguiera el juego, salió del encordado e hizo que se estrellara con uno de los postes del ring.
Hasta cierto punto, el combate fue técnico, pero todo se rompió cuando Edge atacó desde la tercera cuerda a su rival e hizo que éste terminara ensangrentado.
Con una llave de rendición, Edge intentó arrancarle la victoria a Orton, pero Randy logró colocar el pie en la cuerda y se salvó.
Orton se recuperó y atacó a su otrora pareja contra el plástico que separa de la zona de aficionados y posteriormente contra la escalera metálica y la mesa de comentaristas.
Edge se recuperó con tres suplex consecutivos y machetazos en el pecho.
Randy logró hacer un superplex que dejó a Edge en la lona, aunque el conteo no llegó a tres. A nada estuvo de perder el canadiense. Cuando Orton intentó poner punto final en la lucha, Edge logró aplicar un DDT, aunque el hijo del Bob “Cowboy” Orton logró evitar la derrota.
Los dos luchadores llevaron a los fanáticos a una montaña rusa emocional al aplicar varios castigos clásicos que otros gladiadores hicieron famosos.
En la recta final, Edge castigó a Orton con dos lanzas y Randy aplicó dos RKO al rival, sin embargo, el canadiense no resistió un foul con la rodilla y posteriormente la patada a la cabeza de la “Víbora” y perdió.
Con información de ESTO.